Los autores del análisis consideran que estos resultados podrían servir para orientar el counselling sobre temas de fertilidad y salud sexual a mujeres, a pesar de que reconocen que sus datos presentan ciertas limitaciones
Una revisión varios estudios de parejas heterosexuales serodiscordantes (en las que un miembro tiene VIH y el otro no) determinó que la tasa de transmisión del virus dentro de la pareja iba del 0,0 al 0,14 por cada 100 persona-años cuando la persona con VIH tenía una carga viral indetectable gracias a la terapia antirretroviral. Dos análisis distintos [presentados en el III Taller Internacional sobre VIH y Mujer celebrado recientemente en Toronto, Canadá] recopilaron y trataron de forma conjunta los datos procedentes de varios estudios, entre ellos el NPTN 052 (el ensayo en el que se descubrió una tasa de reducción del 96% en el riesgo de transmisión del virus en parejas serodiscordantes; véase La Noticia del Día 19/07/2011).
A pesar de las pruebas reveladas en el ensayo HPTN 052 respecto a la reducción de la transmisión del VIH cuando la carga viral es indetectable, no se había determinado el riesgo de que sucediera. Para abordar este tema, un equipo de investigadores de Canadá efectuó una revisión sistemática y un metanálisis de estudios en los que se registraron las tasas de transmisión del virus, el historial de tratamiento antirretroviral y la viremia de la persona con VIH.
El equipo de investigadores solo encontró tres estudios que cumplieran todos los criterios de elegibilidad, incluyendo la confirmación de que la persona con VIH de la pareja había alcanzado una carga viral indetectable. Otros tres ensayos cumplieron únicamente los dos primeros criterios de elegibilidad, pero no se confirmó la supresión de la carga viral (incluyendo el HPTN 052).
Los tres estudios que cumplieron con todos los criterios de elegibilidad contaron, en conjunto, con una participación de 991 parejas heterosexuales y aportaron datos equivalentes a 2.064 persona-años de seguimiento. Los resultados acumulados arrojaron una tasa de transmisión del VIH de 0,0 por cada 100 persona años (intervalo de confianza del 95% [IC95%]: 0 – 0,5).
A continuación, en la revisión se tuvieron en cuenta los tres estudios que contenían datos sobre las tasas de transmisión e historial de tratamiento, pero no habían confirmado la carga viral. El estudio HPTN 052 aportó 1.763 parejas participantes y los otros dos estudios, 3.470 parejas más. Al tener en cuenta los datos agrupados de los seis estudios, se comprobó que el riesgo de transmisión global fue de 0,14 por cada 100 persona-años (IC95%: 0,04 – 0,31).
Los seis ensayos detectaron cuatro casos de transmisión del virus y en las cuatro ocasiones tuvieron lugar en los seis primeros meses de la terapia antirretroviral de la persona con VIH, por lo que es posible que aún tuviera una carga viral detectable.
El equipo de investigadores señaló que su estudio presentaba varias limitaciones, como por ejemplo: No incluyó parejas del mismo sexo, no tuvo en cuenta diferencias entre sexo vaginal y anal, no determinó la frecuencia de las prácticas sexuales, no comprobó el origen de la infección por VIH, no comprobó la carga viral exacta en el momento de producirse la infección, no tuvo en cuenta las posibles infecciones de transmisión sexual (ITS) ni precisó el grado de uso del preservativo.
A la luz de los resultados del metanálisis, los autores concluyen que existe un riesgo mínimo de transmisión sexual del VIH en parejas heterosexuales serodiscordantes en donde la persona seropositiva tiene una viremia indetectable con la terapia antirretroviral. Consideran que estos hallazgos pueden ser útiles a la hora de asesorar a las mujeres con VIH sobre temas de fertilidad y salud sexual.
Fuente: NATAP.
Referencias: Letchumanan M, Wu W, Bondy L, et al. Systematic review of HIV transmission between heterosexual serodiscordant couples where the HIV-positive partner is fully suppressed on ART. Third International Workshop on HIV and Women. January 14-15, 2013. Toronto. Abstract O_04.
Cohen MS, Chen YQ, McCauley M, et al. Prevention of HIV-1 infection with early antiretroviral therapy. N Engl J Med. 2011; 365: 493-505.