De la misma manera, comenzar el tratamiento con más de 500 células/mm^3 también permitiría preservar la función inmunitaria.
Un estudio publicado en la edición del 24 de noviembre de JAMA Internal Medicine ha concluido que aquellas personas que inician el tratamiento antirretroviral más de un año después de la seroconversión tendrían una menor probabilidad de obtener la normalización de los niveles de CD4 una vez se instaure dicho tratamiento.
Existe cada vez más evidencia científica que apunta a que iniciar el tratamiento antirretroviral en fases tempranas de la infección por VIH favorece la conservación de la función inmunitaria. Este hecho, unido al desarrollo de fármacos antirretrovirales cada vez más tolerables, ha propiciado a un inicio temprano de la terapia antirretroviral. Las recomendaciones españolas actuales de inicio del tratamiento frente al VIH contemplan su uso en todas las personas con VIH independientemente de los niveles de CD4, aunque la fortaleza de la recomendación es mayor en personas por debajo de 500 células/mm^3 que en aquellas por encima de dicho umbral.
Con el objeto de ahondar en los conocimientos relativos al impacto del inicio del tratamiento sobre la recuperación de los niveles de CD4, investigadores estadounidenses realizaron un estudio que contó con la participación de 1.119 personas de una cohorte de militares de EE UU que habían alcanzado carga viral indetectable bajo tratamiento antirretroviral y de las cuales se contaba con registros de las fechas aproximadas de seroconversión.
El 95% de los participantes eran hombres. Aproximadamente la mitad eran de etnia blanca y la otra mitad de etnia negra. La mediana de la edad al iniciar el tratamiento antirretroviral era de 31 años.
Los investigadores analizaron diversos marcadores de activación de las células T, de disfunción inmunitaria y de respuesta inmunitaria. La capacidad de responder a la vacuna contra el virus de la hepatitis B (VHB) se consideró un factor de respuesta inmunitaria.
En el estudio, se consideró normalización de los niveles de CD4 alcanzar una cifra de, como mínimo, 900 células/mm^3 , la mediana de los niveles observados en un estudio realizado con personas sin VIH realizado con anterioridad.
El 26,1% de los participantes iniciaron el tratamiento antirretroviral durante el primer año tras la seroconversión. El 57,6% lo iniciaron dentro del primer año dentro del estudio. La mediana del tiempo entre la seroconversión y la entrada en el estudio fue de 10 meses.
En total, el 30,9% de los participantes obtuvo la normalización de los niveles de CD4. Entre quienes habían iniciado el tratamiento dentro del primer año tras la seroconversión, el porcentaje de personas que alcanzaron la normalización de los niveles de CD4 fue del 38,4%, mientras que el porcentaje en quienes iniciaron el tratamiento antirretroviral con posterioridad fue del 28,3%. La diferencia alcanzó valores significativos.
De forma proporcional, a mayores incrementos en los niveles de CD4, menor fue el riesgo de experimentar progresión a sida.
Los niveles de los marcadores inmunitarios analizados se asemejaron más a los de personas sin VIH en aquellos casos en los que se había alcanzado la normalización de los niveles de CD4.
Los participantes con recuentos de CD4 de, como mínimo, 500 células/mm^3 en el momento de iniciar el tratamiento presentaron una probabilidad de normalizar los niveles de CD4 cuatro veces superior a la observada entre quienes iniciaron la terapia antirretroviral con niveles de CD4 más bajos.
En conjunto, iniciar el tratamiento dentro de los 12 meses tras la seroconversión se asoció a:
- Un menor riesgo de experimentar progresión a sida (riesgo del 7,8% frente al 15,3% experimentado por aquellas personas que iniciaron el tratamiento con posterioridad).
- Una menor activación de las células T (del 12% frente al 15,6% de células CD4 activadas en personas que comenzaron el tratamiento de forma más tardía).
- Un mayor porcentaje de respuesta a la vacuna contra la hepatitis B (del 67,9% frente al 50,9% observado en quienes empezaron terapia antirretroviral posteriormente).
Los resultados del presente estudio muestran que el inicio del tratamiento antirretroviral dentro del primer año de la seroconversión –del mismo modo que iniciarlo con niveles de CD4 superiores a 500 células/mm^3 – reduciría de forma importante el riesgo de progresión de la infección por VIH y el de experimentar comorbilidades, además de relacionarse con una mayor probabilidad de experimentar una normalización de los niveles de CD4.
Estos resultados apoyarían las recomendaciones españolas actuales que, como se refirió anteriormente, ya contemplan el inicio del tratamiento antirretroviral en todas las personas con VIH independientemente de los niveles de CD4.
Fuente: Hivandhepatitis / Elaboración propia (gTt-VIH <http://www.gtt-vih.org>).
Referencia: Okulicz JF, Le TD, Agan BK, et al. Influence of the Timing of Antiretroviral Therapy on the Potential for Normalization of Immune Status in Human Immunodeficiency Virus 1-Infected Individuals. JAMA Internal Medicine. November 24, 2014 (Epub ahead of print).